venía de un largo viaje
estaba cansado
entró
caminó tres pasos
y se detuvo
miró hacia abajo
como buscando sus pies
no los veía
su mirada
fue más allá del piso
de vidrio esmerilado
después penetró el techo
que era igual al piso
luego la pared
de vidrio
transparente
un enorme ventanal
de 360 grados
abajo
arriba y alrededor
el paisaje
era el mismo
vió sombras y luces
que parecían respirar
una mesa
una silla
y esos objetos extraños
que señalaban
"doce y media" y "tres menos cuarto"
a la vez
afuera
las nubes
no se movían
pasó días
mirándolas
notó por primera vez
que a determinada hora
perdía
la noción del tiempo
dejó de comer
también de dormir
sin darse cuenta
tuvo la extraña sensación
de no tener cuerpo
de no estar en ningún lado
y de "ser" siempre viajando
luego
cerró los ojos
escuchando
el silencio
y se quedó dormido
se despejaron dos nubes
en direcciónes opuestas
y un rayo del sol
ya extinguido
arribó
en las sandalias rotosas
y besó
los pies
ensangrentados
.
2 comentarios:
me pareció hermoso...
tiempo sin tiempo. Olvidarse de todo, hasta de la propi existencia.
besos
Gracias querida Roxana por todos tus comentarios, por tu constancia, tu reinsidencia despojada, por estar presente y por no pedir nada.
Mil abrazos... y más.
Yo la agradecida.
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