Nuevamente la sorprendí jugando sola...
Le dije -¿Por qué siempre estás jugando a la Ruleta Rusa en soledad si sabés que no me gusta?
Me dijo -Lo hago porque me gusta, y se acabó.
Le dije -¿A si? A ver si te gusta ésto...
Tomé el revolver.
Las manos me temblaban.
Apunté en dirección a mi cabeza.
Disparé.
Y ésta vez...
NO ERRÉ.
AVISO
-
Abrí este blog para recuperar el registro de mi blog anterior: las
mierdautorías.
Y ya que estamos aquí, aprovecharemos para ir publicando basura reciclad...
Hace 7 años.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario